El objetivo es lograr una previsibilidad clínica combinada con unos exitosos resultados estéticos. El grosor de los tejidos blandos y la anatomía ósea son factores que, combinados, pueden afectar al éxito clínico y al mantenimiento a largo plazo de los tejidos blandos y duros alrededor del implante.

La limitación anatómica del maxilar anterior a menudo hace que los implantes se coloquen en un ángulo labial inclinado. Esto requiere del uso de pilares angulados o de prótesis cementadas que pueden comprometer los resultados estéticos y crear complicaciones en los tejidos blandos.
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El tamaño y la forma del zócalo de múltiples raíces a menudo no son adecuados para la colocación de un implante típico, lo que resulta en una posición comprometida del implante o una estabilidad primaria deficiente.

Esto puede resultar en un período de espera de 3-4 meses para permitir la curación antes de intentar colocar un implante. El sitio curado a menudo presentará una reducción en la altura del hueso, lo que resultará en la necesidad de aumento, especialmente en el maxilar.

Esta situación conduce a un mayor periodo de espera en el tratamiento junto a un mayor coste y complejidad.
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Southern Implants trabaja con centros de rehabilitación líderes en todo el mundo para desarrollar soluciones de tratamiento innovadoras.

• Implantes cigomáticos y oncológicos
• Implantes ultracortos, cortos y ultralargos
• Implantes ultraestrechos
• Implantes angulados

Los usuarios profesionales que desean más opciones han impulsado la gama protésica, caracterizada por numerosos productos únicos e innovadores.
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Las superficies rugosas de los implantes dieron lugar a mayores tasas de éxito y protocolos mejorados, como la carga inmediata y la simplificación de los tratamientos, tanto para el profesional como para el paciente.

Sin embargo, en pacientes de alto riesgo, las superficies mecanizadas tienen mejores resultados a largo plazo.
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